1º ¿Cómo recibiste la noticia de ser tutor del CES?
Pues imagínate, con nervios, emocionado y en parte algo "preocupado" por la responsabilidad que suponía esta inesperada noticia. Esa llamada significaba mucho para mí, porque entendí que era una recompensa al esfuerzo que hice durante el CES15 y a la vez una oportunidad para crecer profesionalmente y seguir aprendiendo de los mejores, aunque esta vez desde "el otro lado de la luna".
2º ¿Qué piensas cuando estás allí de tutor un año después de ser alumno?
Sinceramente lo primero que hice fue preguntarme ¿qué hago yo aquí?, estaba un poco desubicado, ya que por mi forma de ser el hecho de no tener muy claro qué podía aportar al curso me hacía estar algo inseguro, pero poco a poco fui dándome cuenta que tenía mucho que ofrecer, recuperando la confianza en mi mismo y poniendo en valor tanto a los alumnos como a mis compañeros.
3º ¿Cómo has vivido el desarrollo de esas dos semanas de curso?
Pues como he comentado anteriormente, al principio estaba algo preocupado por el simple hecho de no tener muy claro qué necesitaban de mí, pero tras unos días te das cuenta de que todo forma parte del "plan" de Miguel Martín, él tiene claro cómo te vas a sentir al principio, y según vas cogiendo confianza empieza a darte una serie de oportunidades para que puedas crecer a lo largo del curso, aunque desde el minuto 0 la exigencia es máxima, no hay margen al error, y os aseguro que errores he cometido muchos, eso sí, siempre he recibido el máximo apoyo y respaldo de mis compañeros Varis, Manu, Santi y por supuesto Carlos.
En cualquier caso, creo que el punto de inflexión del curso fue la lesión de Carlos Colinas, eso supuso un varapalo para todos, no solo por el hecho de que Carlos y su experiencia es insustituible, sino porque además se potenció un sentimiento de "equipo" entre los tutores y staff técnico que hizo que pudiéramos superar su ausencia apoyándonos los unos con los otros. Este fatídico día fue clave para mí ya que era el momento de dar un paso adelante e intentar estar al nivel que requería la situación, y espero haber sido de ayuda en este aspecto, me siento orgulloso de haber podido ayudar y darlo todo cuando más se necesitaba.
El final del CES creo que es otro de los momentos clave de un tutor, en esos dos últimos días es cuando te das cuenta de que Miguel Martín y el resto de tutores están hechos de otra pasta, es ahí cuando observas realmente a la velocidad real a la que van esas mentes, la novena marcha es algo tangible, o eres capaz de subirte al barco o te quedas a la deriva.
4º ¿Con qué experiencia, sensación y/o aprendizaje te quedas para siempre?
Son muchas las sensaciones que te llevas a casa, la primera es agradecimiento, no paro de estar agradecido a Miguel por la oportunidad que me ha otorgado y ojalá tenga la opción de continuar colaborando de una forma u otra con él y la FEB.
Quiero recalcar que esas dos semanas dan para aprender MUCHO, no os podéis imaginar cuánto. Si como alumno fue una de las mayores experiencias baloncestísticas de mi vida, acudir al CES16 como tutor es sin duda la mejor, estando ésta muy por encima de cualquier otra vivencia que haya tenido como entrenador.
Por último, quiero recalcar que tras conocer en profundidad a los diferentes tutores, solo puedo pensar en seguir formándome, seguir aprendiendo, es fundamental aprender de los mejores y saber escuchar lo que cada entrenador puede ofrecerte, tener la mente abierta es clave para crecer, no hay verdades absolutas, con humildad y dedicación puedes alcanzar la excelencia y eso es irrefutable.
5º ¿Qué consejos les darías a los entrenadores andaluces que tienen interés en seguir formándose? ¿Quieres realizar alguna mención especial?
Sin duda alguna el CES es el reto por el que todos los entrenadores deberían pasar una vez en su vida, creo que este curso te cuestiona todo lo que creías que estaba bien o que hacías bien y siempre te abre una puerta para que te replantees tu forma de entrenar, de ahí la importancia de querer seguir formándote, con humildad, y siempre dispuesto a aprender de los mejores.
Creo que los entrenadores andaluces estamos a un nivel alto y estamos reconocidos fuera de nuestra comunidad, por lo que debemos seguir en esa línea de trabajo, aquí es donde la Federación Andaluza debe seguir construyendo y fomentando la formación continua de todos los entrenadores de nuestra Comunidad.
Aprovecharé esta ocasión para mencionar a mis compañeros del CES y agradecerles uno a uno todo lo que han hecho por mí durante esos quince días.
A Varis quiero darle las gracias por su cercanía, por el cariño y la paciencia que ha tenido, su bondad y nobleza hacen que todo sea mucho más sencillo.
Quiero dar las gracias a Manu Peña por tenderme su mano en múltiples ocasiones, pudiendo contar con él siempre que lo he necesitado, todo un referente y un gran amigo.
Lo de Santi Pérez es otro tema, es increíble lo que habré podido aprender de él durante el curso, haber compartido tantas horas solo hace que piense en seguir trabajando más y más para alcanzar a tener aunque sea una mínima parte de su capacidad para analizar el baloncesto como lo hace él.
No me olvido de Carlos Colinas, el cual fue mi tutor cuando hice el CES como alumno y que cuando he tenido la oportunidad de conocerle desde otro punto de vista te das cuenta de por qué todo el mundo lo respeta y admira, simplemente un honor haber podido aprender de él, aunque haya sido menos tiempo del que me hubiera gustado.
Para terminar, debo hacer una mención especial a Miguel Martín, el capitán del barco, sin él sería imposible que el CES tuviera el éxito que tiene... simplemente brillante, genial. Gracias por la oportunidad que me ha ofrecido y sobretodo espero no haber defraudado.